¿Desde cuándo congelamos nuestros alimentos?

Los equipos de frío industrial en Valencia son hoy en día fundamental para la conservación de alimentos perecederos, como el pescado, la carne o las verduras. Mantener estos productos a bajas temperaturas es clave para prevenir las enfermedades que se derivan de consumir alimentos que se encuentran en mal estado.

Es precisamente por eso que los equipos de frío industrial en Valencia son tan importante para los grandes almacenes y restaurantes en la actualidad. De hecho, hay que tener en cuenta que las graves consecuencias de consumir alimentos en mal estado ya eran conocidas por nuestros antepasados más lejanos.

A lo largo de la prehistoria se han encontrado indicios de que ya intentaban frenar la descomposición de sus presas mediante la utilización de agua y hielo, guardando a las mismas en el fondo de las cavernas. Más tarde, entre la Edad Antigua y la Edad Media, la conservación de los diferentes alimentos se hacía con sal y otras especias.

Tenemos que avanzar hasta 1748 para encontrarnos con el primer frigorífico más o menos semejante a los actuales, ya que funcionaba gracias a la electricidad. Este fue inventado por el escocés William Cullen. Pero aún tendremos que esperar cien años más para que la congelación de los alimentos se volviera un fenómeno comercial.

Podemos datar el descubrimiento del frío industrial en el año 1874, con el “Frigorifique”, el primer barco frigorífico de la historia, que iba cargado de carne desde Francia hasta Argentina. A partir de entonces, los avances en la congelación de alimentos experimentan un progreso fulgurante:

- En 1931 se empiezan a comercializar frigoríficos en Europa, aunque no llegan a España hasta 1952.

- En 1945 se sirven los primeros platos congelados: fue a pasajeros de líneas aéreas norteamericanas.

- En los años 60 los alimentos congelados gozan un gran aumento de demanda.

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